Recientemente, en la Planta de Coca Cola Andina ubicada al este de la ciudad de Córdoba, se produjo un derrame de 5000 litros de ácido clorhídrico, dejando como saldo dos guardias heridos y 120 evacuados. Según se informó en el peritaje policial, el hecho se produjo por la existencia de un caño en mal estado.

Vale recordar que, en septiembre de 2024 en la ruta nacional A012, un camión cisterna derramó 4000 litros de esta misma sustancia, la cual representa un alto riesgo para la salud, debido a los daños graves e inmediatos que puede causar en los tejidos.

▪ Estos hechos sucesivos se enmarcan en un contexto general de desregulación y carente de controles en lo que a la manipulación de sustancias químicas refiere, y hacen evidente la necesidad de que las autoridades arbitren los medios necesarios para que las actividades vinculadas sean llevadas a cabo por personal idóneo y debidamente matriculado, como así también bajo el imperio de la normativa y los protocolos de seguridad vigentes. 

✨ En países como el Reino Unido, el uso de ácido clorhídrico está estrictamente regulado debido a su alta peligrosidad para la salud y el ambiente, y porque entre otras cosas, puede ser implementado para perpetrar actos terroristas. Como contraparte, en el territorio nacional, se ha naturalizado que la manipulación, el transporte, la producción y el almacenamiento de ésta y otras sustancias de potencial riesgo, se encuentren librados “al azar”, al estar a cargo de personal sin idoneidad ni capacitación suficiente, y desprovistos de acciones de contralor para garantizar procesos seguros y sujetos a la Ley.

Así, desde el Consejo Profesional de Química de la Provincia de Buenos Aires, se reitera el llamado a las autoridades gubernamentales a accionar en pos de la salud de la población y un ejercicio de la Química seguro y legal, bajo los preceptos fundados en la Ley 7020. 

▪ Asimismo, se hace manifiesta la plena voluntad de esta institución de participar activamente en cada instancia de trabajo conjunto, de cara a generar un cambio positivo que tienda a revertir esta problemática. 

▪ En tanto, las industrias pueden contactarse con este Consejo Profesional a los efectos de informarse del proceso de matriculación obligatorio para profesionales químicos, para encuadrar así sus actividades dentro del marco de la Ley.